lunes, 29 de noviembre de 2010

Las filtraciones de Wikileaks


Lo reconozco. No entiendo una palabra de todo este asunto de los cientos de miles de documentos secretos del gobierno de Estados Unidos que ha sacado a la luz una página web llamada wikileaks. Se me escapa por todas partes.

Para empezar habría que decir que los mencionados documentos secretos, por muchos y muy secretos que sean, no indican la ubicación de los misiles nucleares que pueda tener una potencia mundial como China, por ejemplo, ni pone en riesgo la seguridad de ninguna nación. Más bien hablan de chismorreos, de lo que opinan los espías yanquis sobre los mandamases asiáticos y europeos y cosas por estilo. Sin embargo, se insiste en que son documentos secretos. Y ahí empieza la cosa.

No es fácil guardar un secreto. Todo el mundo sabe que, por tonto que sea el asunto o, muy al contrario, por muy reservado que sea, al cabo de un tiempo lo conoce hasta el gato. Y si no es fácil guardar uno solo, ¿cómo se guardan cientos de miles? Según las noticias, la página wikileaks ha filtrado la friolera de 250.000 documentos secretos de los Estados Unidos. No uno ni dos, sino doscientos cincuenta mil. Y no es la primera vez que sucede algo parecido.

El sentido común dice que, para que eso sea posible, es necesario que haya algún topo. Un topo muy listo, capaz de vaciar los armarios del Pentágono sin que nadie se dé cuenta. O eso, o los de wikileaks han sido capaces de descifrar un millón de claves y han accedido a los archivos de los servicios de inteligencia de Estados Unidos. Desde mi punto de vista, ni una cosa ni otra tienen sentido. Es muy extraño, también, que el dueño o el fundador de la página web en cuestión siga vivo. Me extraña. O sea que solo puede tratarse de una cosa: el propio servicio de inteligencia de los Estados Unidos ha permitido o ha originado la filtración. ¿Por qué? ¿Con qué objeto? Ni idea, ya digo. Pero lo cierto es que a nadie le puede importar mucho si los espías norteamericanos sospechan que Berlusconi se pasa de la raya en las fiestas que organiza en alguna de sus mansiones. O si Zapatero es un socialista trasnochado y romántico. O si al otro le pica la rabadilla. ¿A qué viene, entonces, toda esta historia? Tal vez lo sepamos dentro de un tiempo. Pero sospecho que tendrá que ser dentro de mucho, mucho tiempo.

(La imagen está extraída de webzine21)

viernes, 26 de noviembre de 2010

La izquierda de Zapatero

Después de haber regalado un montón de millones a la banca para salvar la crisis que había generado la propia banca, después de haber recortado casi todos los derechos sociales y después de haber aparcado la Ley de Libertad Religiosa para que no se enfaden los curas, el presidente Zapatero va a entrevistarse con los treinta empresarios más fuertes del país para darles facilidades fiscales... al margen de lo que digan los pequeños empresarios, con quienes no va a reunirse nadie. Si eso está sucediendo con la izquierda en el poder, ¿qué pasará cuando gobierne la derecha?

miércoles, 24 de noviembre de 2010

¿Dónde está la gripe?

Qué curioso. Después de unos años de volvernos locos con las amenazas de gripe en sus muchas variantes, este año ni siquiera la han mencionado. Según la ausencia de noticias al respecto, nadie está en peligro de pillar la gripe, ni la B, ni la aviar, ni la estacional. No hay que vacunarse, no pasa nada. El año pasado, el anterior, y el anterior al anterior, estuvimos a punto de morir todos de gripe. Pero hoy no hay nada de eso. Y nadie está pagando por haber dado la alarma, en el pasado, de cosas inexistentes.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Pena de muerte por blasfemar


Si la presión internacional no lo remedia, una mujer va a morir ejecutada en Pakistán por haber blasfemado contra Mahoma. La mujer dice que quieren matarla por ser cristiana. Vaya. Parece que todavía estemos viviendo aquellos siglos de oscurantismo de la Edad Media. ¿Cómo es posible que aún sigan pasando estas cosas? Porque, la verdad, no sé qué es peor: una doctrina que ordena matar a quien diga creer en un Dios diferente a su dios o una doctrina que permite que sus fieles mueran por decir que no hay otro Dios que el suyo.

(En la foto, Asia Bibi, la mujer condenada a muerte. La imagen está extraída de telecinco)

jueves, 18 de noviembre de 2010

De nuevo El Valle de los Caídos

Entre algunas otras cosas, el Foro por la Memoria de la Comunidad de Madrid pide la voladura de la gran cruz del Valle de los Caídos. Ya di mi opinión al respecto años atrás, pero si es necesario la vuelvo a dar. Es esta: si volamos el Valle de los Caídos o parte de él por ser la obra de un tirano o un dictador, que lo mismo me da, también debemos volar el anfiteatro romano de Tarragona, por ejemplo, o las estatuas ecuestres de numerosos generales que pueblan nuestras plazas mayores.

jueves, 11 de noviembre de 2010

¿A quién votamos realmente?


En su libro de memorias, el ex presidente de los Estados Unidos, George Bush, dice claramente que, en principio, él no estuvo de acuerdo con la intervención militar en Irak. Si hemos de creer sus palabras, la suya fue la voz discordante cuando se planteó la invasión.

Bueno, es muy difícil creerle. A lo largo de su mandato soltó tantas mentiras que, a día de hoy, sólo pueden creerle los fanáticos del partido republicano y sus familiares. No obstante, una de las mayores virtudes del mencionado ex presidente no es, precisamente, la prudencia. Y en esta ocasión tal vez se haya pasado de largo hablando y haya dicho la verdad. ¿Por qué no? Vamos a jugar a que así es.

Es sabido que, si no todos, casi todos los presidentes de Estados Unidos son o han sido masones. También lo fueron los padres de la patria, los redactores de la famosa Constitución norteamericana, como nunca se ha intentado ocultar. Incluso los billetes de dos dólares exhiben iconografía masónica. De algún modo, entonces, los masones han intervenido en infinidad de actividades y decisiones del gobierno de los Estados Unidos. Eso no quiere decir que sean ellos los que manden. Sólo significa que están ahí, que tienen bastante poder y que, sin duda, de vez en cuando lo utilizan.

Cuando el ex presidente George Bush dice que él no quiso iniciar la guerra de Irak, está sugiriendo, de una u otra manera, que tuvo que plegarse ante las decisiones de otros. ¿Quiénes? Ahí está el tomate. No creo que los sujetos que le empujaron a iniciar la guerra fuesen inocentes miembros del gobierno. Tampoco creo que quienes le ayudaron a acceder al poder de la forma tan irregular en que lo hizo fuesen monjitas de la caridad o simples políticos. George Bush, en sus memorias, nos está diciendo que algo se mueve en la sombra y que, a menudo, es más poderoso que el presidente.

Por supuesto, no estoy acusando a nadie. Ni siquiera a los masones, cuya mención obedece exclusivamente al intento de demostrar que las sociedades secretas –sean cuales sean- no son ajenas a los círculos de poder. Están ahí. Y ellas, o algún engendro similar, pudieron obligar a un presidente de los Estados Unidos a ir a la guerra. Lo dice Bush entre líneas. Y puede ser verdad.

Ahora bien. Si todo un presidente de los Estados Unidos puede tener que obedecer las órdenes o las imposiciones de alguien o algo que se nos oculta, la pregunta que me hago es: Cuando votamos, ¿a quién estamos votando realmente?


(La imagen está extraída de jorgefabianvillalba. Como puede observarse, todos los personajes de la pintura, incluido George Washington, llevan los mandiles que utilizan los masones)

lunes, 8 de noviembre de 2010

La visita del Papa


Desde mi punto de vista los católicos deberían estar indignadísimos con esos multimillonarios paseos de Benedicto XVI y de sus predecesores. La figura del Papa no se parece en nada a la de Jesucristo. Absolutamente en nada.

Lo anterior no importaría lo más mínimo si el Papa viniese y se dedicase exclusivamente a evangelizar. Pero no. Viene a España, pagado por el Estado español, y lo primero que dice, antes de bajar del avión, es que el anticlericalismo actual de nuestro país es igual al que existió en los años de la segunda república, cuando se incendiaron conventos y se cometieron unos cuantos abusos contra los curas. Bravo. Luego, por si acaso no habían quedado claras sus intenciones, arremete contra ciertas leyes del país que le está acogiendo, como la del aborto o los matrimonios homosexuales. O sea que, aparte de haber venido para echar un vistazo a la realidad de los que le pagan las angulas, el Papa ha venido para montar el pollo. ¿No venía en calidad de jefe de Estado? ¿Y qué jefe de Estado pone en cuestión las leyes del país donde es invitado? Los españoles no le necesitamos para sacudirnos mamporros unos a otros. Nos bastamos solos.

Sin embargo, y por suerte, la visita de B-16 no ha conseguido el éxito que tuvo la de su antecesor, JP-2, en los años ochenta. De hecho, ha sido un fracaso. En Santiago no ha llenado ni la mitad de las plazas hoteleras. En Barcelona se esperaba la presencia de cuatrocientos mil fieles y han acudido unos cien mil. ¿No sería hora de que el Santo Padre se plantease un par de cosas? Aunque no, claro, ¿qué tonterías estoy pensando?

(He obtenido la foto del foro de audisport-iberica)

sábado, 6 de noviembre de 2010

Aún hay quien tiene dignidad


Mi amigo Gatopardo me lo ha soplado. Santiago Sierra ha rechazado el Premio Nacional de Artes Plásticas, dotado con 30.000 euros y el supuesto prestigio. En su carta a la ministra de Cultura, el artista dice:


Estimada señora González-Sinde,

Agradezco mucho a los profesionales del arte que me recordasen y evaluasen en el modo en que lo han hecho. No obstante, y según mi opinión, los premios se conceden a quien ha realizado un servicio, como por ejemplo a un empleado del mes.

Es mi deseo manifestar en este momento que el arte me ha otorgado una libertad a la que no estoy dispuesto a renunciar. Consecuentemente, mi sentido común me obliga a rechazar este premio. Este premio instrumentaliza en beneficio del estado el prestigio del premiado. Un estado que pide a gritos legitimación ante un desacato sobre el mandato de trabajar por el bien común sin importar qué partido ocupe el puesto. Un estado que participa en guerras dementes alineado con un imperio criminal. Un estado que dona alegremente el dinero común a la banca. Un estado empeñado en el desmontaje del estado de bienestar en beneficio de una minoría internacional y local.

El estado no somos todos. El estado son ustedes y sus amigos. Por lo tanto, no me cuenten entre ellos, pues yo soy un artista serio. No señores, No, Global Tour.

¡Salud y libertad!

(La foto está extraída de artespain)

viernes, 5 de noviembre de 2010

Que viene el Papa (2)


(El dibujo es de El Roto y está extraído de elpais)

jueves, 4 de noviembre de 2010

Se acabó la prevalencia del apellido paterno

Una nueva ley dice que serán las parejas quienes determinen el orden de los apellidos de los hijos o, en su defecto, seguirán el orden que dicta el alfabeto. Me parece muy bien. Y bastante inútil, por cierto, teniendo en cuenta que desde hace un porrón de años puede uno cambiar el orden de sus apellidos si así le viene en gana. Pero me parece bien la medida, ya digo: las cosas claras.

De esta manera, si el apellido paterno es descaradamente desagradable, puede uno poner el de la madre en primer lugar. Imaginemos que nuestro padre se apellida… no sé… por ejemplo, Mussolini. Sí, eso es. Imaginemos que nuestro padre se apellida Mussolini y que, por lo tanto, nosotros deberíamos llamarnos Francisco Javier Mussolini. Suena raro, ¿no? Pero resulta que tenemos la oportunidad de poner, en primer lugar, el apellido materno. Creo que, salvo algunas excepciones, todo el mundo cambiaría el orden de sus apellidos para que no nos llamaran Mussolini en el colegio; y así, si nuestra madre se apellida… por ejemplo… Hitler, podemos colocar este último apellido en lugar del primero y nos llamaríamos Francisco Javier Hitler Mussolini, que es mucho más chulo que llamarse Francisco Javier Mussolini Hitler.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Miguelín, el muñeco de Shanghai


El pabellón de España en la Expo de Shanghai ha ganado el premio de bronce al diseño arquitectónico. Ése es el titular de todas las noticias al respecto, aunque en mi opinión debería ser otro.

Cuando empezó la Expo de Shanghai nos enteramos de que España, en su afán de dar a conocer nuestra cultura y nuestra personalidad en el mundo, había colocado en su pabellón… un muñeco elefantiásico, horrendo, espeluznante, que se movía al modo de los autómatas de principios del siglo XX. La verdad es que, con sólo verlo, se le ponían a uno los pelos de punta. Pero ahí se quedó, como el mascarón de proa de nuestra participación en el evento.

Ha pasado el tiempo, la Expo se ha acabado, y España, haciendo gala de sus dotes caballerescas, ha donado a China el muñeco de los cojones. Ése debía haber sido el titular, y no el del premio de bronce: Mediante una astuta estratagema nos hemos deshecho del engendro diabólico. ¡Menos mal! ¿Qué habría pasado, si no hubiera sido así? Probablemente habrían paseado al monstruo por todas las ciudades de España y habríamos tenido muñeco para rato.

Felicitémonos, pues, por semejante donación, y felicitemos a ese alma noble y anónima que, viendo que el muñeco iba a volver a casa, decidió regalárselo a los chinos, aun a riesgo de iniciar un enfrentamiento diplomático de sabe Dios qué envergadura.

(La foto está extraída de elpais)